Nueva York. Alexander Flemming, quien tiene un historial de 10 arrestos previos y es afroamericano, fue responsable de la muerte de su tía, Juanita Dallas de 55 años, utilizando un palo de escoba durante una disputa. Esta pelea sucedió después de que al sobrino le fuera negado el acceso al edificio por el dueño, quien estaba preocupado por los problemas que Flemming causaba, incluyendo actos inapropiados como orinar y defecar frente a la propiedad.
Flemming, quien lucha contra una severa adicción a las drogas, exigía a su tía permitirle la entrada, demanda que ella rechazó. Esto exacerbó una discusión vehemente por la prohibición de entrada, desencadenado el trágico incidente.
El homicidio ocurrió dentro del edificio ubicado en la calle 164 en Queens, donde, en medio del altercado con su tía, Flemming la golpeó mortalmente con el palo de una escoba.
Según testimonios de familiares y residentes del edificio, Flemming era frecuentemente visto bajo efectos de drogas y demostraba un comportamiento mentalmente perturbado mientras vagaba por la zona.
La víctima había residido en ese lugar por una década.
Antes del asesinato de Juanita, el sobrino había agredido al propietario del inmueble y, en una ocasión, incluso defecó frente al domicilio.
Finalmente, Flemming logró acceder al apartamento situado en el sótano, donde cometió el asesinato con la escoba.
Flemming fue acusado de asesinato tras ser arrestado por la policía el martes.
El fatal enfrentamiento tuvo lugar en presencia de la madre de Dallas y su hijo de 15 años, compartió una prima del agresor. Los vecinos consideran este suceso como el punto culminante de una serie de problemas prolongados.
Flemming ya había tenido varios choques tensos con Jainarine Chandick, el propietario, quien manifestó su rechazo a acoger en su propiedad al sujeto con un registro de 10 arrestos previos.
Chandick reveló que había contactado a las autoridades cuando Flemming lo agredió en el rostro, causándole una fractura en el incidente ocurrido a principios de agosto.
“Venía aquí, orinaba en mi concreto, también defecaba allí”, señaló Chandick.
Los antecedentes criminales de Flemming datan de 2018, con un arresto por vandalismo en Queens, según los registros judiciales.
Tras ser liberado de prisión, continuó enfrentándose a la ley por robos y comportamiento indecente frente a un menor.
El dueño añadió que, semanas antes del homicidio, Flemming ingresó por la fuerza al patio.
“Intenté detenerlo, pero me golpeó en el rostro y dañó la luz de la puerta, dejándola inoperante”, explicó el propietario.
José Lizo, un vecino, mencionó que solía ver a Flemming intoxicado, deambulando con dificultad y pareciendo un zombi.
Lizo también compartió que, en una ocasión, al encontrar a Flemming revisando su automóvil, este apenas podía mantenerse en pie o los ojos abiertos.
“Cuando venía a visitar a su familia, llamaba a la ventana para que le permitieran entrar”, agregó Lizo.
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