Fotografías y videos del avión ATR-72-500 desplomándose de forma espiral antes de impactar en San Pablo, Brasil, con decenas de personas a bordo este viernes, han provocado que expertos analicen las adversas condiciones meteorológicas y una potencial pérdida de control como probabilidades detrás de la tragedia.
El término “pérdida de control” o stall, refiere a un fenómeno aerodinámico donde el avión deja de tener la capacidad de ascienda necesaria para volar. Ocurre cuando el ángulo de ataque – el ángulo entre la cuerda del ala y la dirección del viento – supera un límite crítico, generando turbulencias en el flujo de aire sobre el ala, lo cual reduce significativamente la lift or sustentación.
Esta pérdida de lift hace que el avión inicie un descenso brusco. Aunque es una situación manejable si se realiza correctamente, se trata de un escenario conocido dentro de la aviación, preparando a los pilotos con entrenamiento especializado para recuperarse de tales situaciones. Para retomar el control, es necesario reducir el ángulo de ataque, lo cual usualmente requiere inclinar hacia abajo la parte frontal del avión y permitir que el flujo de aire se reestablezca sobre las alas, recuperando así la sustentación.
Geraldo Portela, un especialista brasileño en seguridad y gestión de riesgos, indicó al sitio G1 que los videos del suceso en San Pablo muestran “un problema de control” en la nave. “Según las imágenes, está en pérdida, eso significa que ha perdido la capacidad de ascienda porque requiere una velocidad mínima para mantenerse en el aire”.
La Fuerza Aérea Brasileña ha designado a especialistas del Cuarto Servicio Regional de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (SERIPA IV) para realizar la “Acción Inicial del siniestro” y esclarecer sus causas.
Las condiciones climatológicas adversas, incluyendo la posible formación de hielo en las alas, han sido señaladas como una causa potencial de la pérdida de control. Consultas realizadas por G1 y Globonews a pilotos revelan que en la ruta del avión, el cual partió de Cascavel (Paraná) hacia Guarulhos (San Pablo), había presencia de hielo, lo que pudo haber comprometido el vuelo.
Jorge Gonçalves, ingeniero aeronáutico y docente de transporte aéreo en la Escuela Politécnica de la Universidad de San Pablo, sugiere que es apresurado determinar la causa exacta del accidente, aunque admite que la acumulación de hielo es una hipótesis viable, así como un fallo mecánico. “El hielo en el borde de ataque puede alterar las propiedades aerodinámicas del ala y resultar en una pérdida de sustentación, especialmente a bajas velocidades. Es una de las varias posibilidades, incluyendo algún problema mecánico”, aclaró.
Voepass Linhas Aéreas, la compañía aérea dueña del avión siniestrado, ha declarado que está empleando todos sus recursos disponibles para asistir a los afectados, subrayando que aún se desconocen los pormenores de cómo aconteció el siniestro.
La etapa inicial de la investigación se centrará en revisar toda la información disponible y examinar el lugar del accidente. Las causas finales serán definidas tras una investigación exhaustiva realizada por el Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (Cenipa).
FUENTE /INFOBAE
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