Washington, La administración de Estados Unidos ha establecido que los individuos de Cuba, Nicaragua, Haití y Venezuela que ingresaron al país mediante un programa denominado ‘parole humanitario’ no serán elegibles para prolongar su estancia migratoria más allá de dos años, según lo comunicó un representante del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Aproximadamente 110,000 cubanos, 210,000 haitianos, 93,000 nicaragüenses y 117,000 venezolanos han arribado a EE.UU. aprovechando este programa, de acuerdo a las cifras más recientes ofrecidas por el DHS.
En total, más de medio millón de ciudadanos de estas cuatro naciones han ingresado a los Estados Unidos bajo este programa, el cual se inició en octubre de 2022 para los venezolanos y fue ampliado a las otras tres nacionalidades en febrero de 2023.
Esta medida fue anunciada justo antes de las elecciones del 5 de noviembre, en un contexto de numerosas críticas al programa por parte del partido republicano y de su candidato presidencial, Donald Trump, quien además prometió finalizar este beneficio si resulta electo.
El ‘parole’, que requiere tener un patrocinador dentro de EE.UU., concede a los beneficiarios la posibilidad de ingresar y trabajar de manera legal en el país por un lapso de dos años.
El Gobierno de Joe Biden introdujo este programa como elemento de su estrategia para controlar la migración hacia Estados Unidos, simultáneamente a la aplicación de restricciones al asilo en la frontera con México.
¿Qué pasará con los migrantes después de dos años?
El ‘parole’ es concebido como una medida “temporal por su misma naturaleza”, diseñado para permitir a las personas trabajar mientras explora otras vías para acceder a beneficios migratorios o alivios, como el asilo o el TPS, explicó un oficial del DHS.
Los migrantes de Venezuela y Haití que entraron al país con el ‘parole’ antes de Julio de 2023 y Junio de 2024, respectivamente, pueden solicitar el TPS. Los ciudadanos cubanos tienen la opción de adquirir una residencia temporal mediante la ley de ajuste cubano.
Para los nicaragüenses no se dispone de una medida específica para su nacionalidad, por lo que deberán solicitar asilo o alguna otra forma de estatus migratorio.
Esta situación también aplica a los venezolanos que ingresaron antes de la fecha de activación del TPS para ellos, lo que afecta a más de 50,000 individuos.
Fuente: EFE
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