Nueva York.— El dominicano Marck Ureña Fernández, quien estaba siendo activamente buscado por la policía de la ciudad y agentes federales, fue detenido en República Dominicana. Se había ocultado en este país tras atropellar mortalmente a Martina Sánchez Alcántara, una abuela dominicana de años, en un incidente de atropello y fuga en la avenida Grand Concourse en El Bronx el de abril de este año.
Después de su huida a República Dominicana, las fuerzas del orden de El Bronx fueron informadas de que Ureña Fernández había escapado al país caribeño en un intento de huir de la justicia.
Se emitió una orden de captura internacional por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, que trabajó en conjunto con las autoridades dominicanas para localizarlo en la República Dominicana y entregarlo a los oficiales de los US Marshalls y detectives locales.
Ureña Fernández enfrenta acusaciones por conducción imprudente que resultó en la muerte de la anciana dominicana.
Ella cruzaba la avenida Grand Concourse en el momento del incidente. La policía indica que fue golpeada fatalmente por Ureña Fernández antes de huir de la escena.
La víctima tenía el derecho de paso en el momento del accidente, de acuerdo con los informes de la policía.
Según la policía, Ureña Fernández huyó, dejando a la anciana gravemente herida en la calle.
“La golpeó y la dejó morir como si fuera un animal”, expresó Gaudy Fonfrías, la afligida hija de Alcántara. “Su cuerpo quedó irreconocible.”
Cuando los detectives ubicaron a Fernández, notificaron a Fonfrías de que había huido hacia República Dominicana.
“Justo después de matarla, tomó un vuelo a República Dominicana”, compartió Fonfrías. “Fue tan brutal el golpe que ni siquiera pudimos realizar un velorio con el ataúd abierto.
“Todavía me siento devastada”, continuó. “Desde el incidente, toda nuestra familia ha estado lidiando con depresión”.
Ureña Fernández fue extraditado a Nueva York, donde se le imputa homicidio involuntario, homicidio por negligencia criminal, fuga del lugar del accidente entre otros delitos).
La justicia le impuso una fianza de $750,000 dólares en efectivo o $2.5 millones de dólares en bonos.
“A pesar de mi dolor, estoy agradecida de que lo hayan capturado”, afirmó Fonfrias. “Deseo que enfrente la justicia. Debe pagar por lo que hizo”.
Antes de su trágico fallecimiento, Alcantara residía en la zona de Fordham, en el Bronx.
“Nuestra familia jamás volverá a ser la misma”, agregó Fonfrías.
Martina fue atropellada mientras se dirigía a su lugar de trabajo cerca de su residencia.
La policía encontró en la escena del crimen un par de zapatillas y lo que parece ser un bolso de mujer, pertenecientes a la víctima.
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